“La vela por las Malvinas surge porque el 12 de marzo, Lucio Ruiz, secretario del dicasterio para la comunicación, me contactó con la sugerencia de buscar a alguien que pudiera encender la vela en las Malvinas”, explicó el embajador ante la Santa Sede. a Télam. ., María Fernanda Silva, también una de las “influencers católicas” escogidas para llevar a cabo el llamado “sínodo digital”.
Silva se refería así al mapa que recibió el Papa este miércoles durante la audiencia general, en el que aparecen, desde Alaska hasta Nueva Zelanda.Más de 47 millones de velas encendidas en su apoyo desde todo el mundo con motivo de la campaña “Ave María por el Papa Francisco”, que también cuenta con dos lugares icónicos del país.
Se encendieron un total de 47.377.264 velas en los cinco continentes y en lugares como la isla del Polo Norte de Svalbard o China.
“Cuando hablé con Ruiz le dije que creía que en ese mismo momento iba a ir a las Islas alguien que conocía y que intentaría ponerme en contacto con él. Y así fue: estaba de visita el veterano de guerra Miguel Ángel Trinidad”. nuestros isleños que estuvieron presentes en la tumba ahora se identifican con su nombre del soldado Julius Cao, su amigo y el único maestro que cayó en Malvinas y que se fue como voluntario”, explicó Silva.
“Y así sucedió que cuando Trinidad, diplomático de carrera de la Organización de los Estados Americanos (OEA), ahora embajador del organismo hemisférico en el Perú, tuvo señal, lo contacté y le envié un mensaje para rezar un Avemaría por el Papa Francisco. . agregó el representante diplomático argentino ante la Santa Sede.
“Y así encendió la vela de Malvinas. Estábamos todos muy emocionados. Encendió la vela de nuestras islas nada más y nada menos que un veterano de guerra”. quien viajó hasta allí para presenciar la tumba ya identificada de su amigo, su compañero de posición, el héroe de la patria, el soldado Julio Cao”, dijo emocionado Silva.
Se encendieron un total de 47.377.264 velas en los cinco continentes y en lugares como la isla de Svalbard o China en el Polo Norte, pero también ciudades cercanas a Alaska o Nueva Zelanda, por ejemplo.
Para las “velas digitales” encendidas en la Antártida, Silva dijo que fue un esfuerzo conjunto con el obispo militar monseñor Santiago Olivera.
“En la madrugada del lunes 13 noté que no había velas en la Antártida, ya esa hora tan tardía me comuniqué con Monseñor Ruiz, con quien le dejé un mensaje para ver que yo me ocupaba. esas velas también se encendieron allí bajo el Papa Francisco”, dijo a Télam el embajador.
“Aproveché la diferencia horaria y le escribí a monseñor Santiago Oliver, obispo militar de la República Argentina, pidiéndole un contacto para enviarle un mensaje para que se encienda al menos una vela de esas bases nuestras”, agregó Silva. . con Télam en el Vaticano.
“De inmediato me puso en contacto con un sacerdote, el padre Francisco, y felizmente ahí empezaron a pasar el enlace entre las bases argentinas y aparecieron las velas en nuestra Antártida”, concluyó.